Los torneos de póquer son una excelente forma de aprender y mejorar tu juego de póquer sin gastar una fortuna.
Si tienes un poco de suerte y llegas a la recta final del torneo, también podrías ganar un buen dinero.
¿Y cómo mejorar tus posibilidades de ganar torneos de póquer? ¡Mira los siete consejos a continuación!
1 – Tengo fichas, luego existo
La principal diferencia entre los juegos de dinero en efectivo y los torneos es la supervivencia. Cuando te quedas sin fichas en el torneo, estás fuera.
Por este motivo, siempre debes saber cuántas fichas tienes, cuáles son las ciegas y dónde te sitúas en relación al recuento promedio de fichas.
El valor de las fichas cambia: al comienzo del juego, tu pila tendrá muchas ciegas grandes: 50, 100, 150 o más. En las etapas intermedias y finales del torneo, la pila de fichas promedio probablemente rondará las 30 ciegas grandes, por lo que, cuantas menos fichas tengas, más debes concentrarte en mantener tu pila saludable.
2 – Piensa antes de usar tus tokens
Al principio del torneo tendrás mucha profundidad y mucho margen de maniobra, podrás ver muchos flops, etc. Pero con el tiempo, tu stack se hará más pequeño y tendrás que calcular y pensar con mucho cuidado antes de arriesgar fichas en un movimiento.
También vale la pena recordar que elegir el torneo adecuado es tan importante como la forma en que juegas. Desperdiciar tu bankroll en torneos en los que no tendrás ventaja ni nada parecido definitivamente será -EV.
3 – La paciencia lo es todo
Una frase para definir cómo debe jugar un principiante un torneo: Jugar ajustado al principio del torneo y aflojar gradualmente el juego hasta los niveles finales.
Por supuesto, esto dependerá de tu stack, pero en general deberías relajarte en los primeros niveles. No te pongas en situaciones difíciles innecesariamente, usa este tiempo para conocer a tus oponentes.
4 – No seas tímido en la burbuja
La burbuja es uno de los momentos más complicados en un torneo de póker. Estarás a solo unos pasos de asegurar tu premio, y tener pocas fichas en este punto puede ser difícil.
Si tienes un stack corto, este es el momento de ser cuidadoso con tus decisiones. Sin embargo, si tienes un stack saludable, ¡ahora es un buen momento para presionar a tus oponentes y aumentar tu stack aún más!
Las fichas en el medio de la mesa estarán esperando por ti, ya que la mayoría de los stacks cortos tendrán miedo de “burbujear” el torneo. Haz tu parte, ¡consigue tus patatas fritas!
5 – No seas demasiado pasivo cuando juegues con pocos jugadores
En la recta final de los torneos, las mesas terminan teniendo menos jugadores de lo normal.
En estos momentos, debes jugar de forma más agresiva, ya que tus cartas ganan más valor debido a que hay menos jugadores en la mesa.
Si esperas demasiado tiempo para que una buena mano entre en un bote, perderás muchas fichas en las ciegas y los antes, lo que hará que tu pila ya no sea una amenaza para los villanos. ¡Piénsalo!
6 – ¿Aviso? Es hora de poner aún más presión.
Si sobrevives hasta este punto y llegas al mano a mano, debes saber que en este punto el juego cambia por completo.
Al jugar con dos jugadores, todas las decisiones te involucrarán y las manos pequeñas ganan mucho valor.
Una mano como A5o puede ser débil en una posición temprana en una mesa de 9 jugadores, pero en un mano a mano es una mano excelente. ¡Presiona a tu oponente y asegura tu victoria!
7 – No abuses en los tratos de la mesa final
Llegar a la mesa final, especialmente en un gran torneo, puede ser tentador. Los premios son grandes y los principiantes terminan intimidados por los valores, aceptando tratos terribles cuando tendrían grandes posibilidades de luchar por mejores premios. Piensa en cada oferta, mira los stacks, los tiempos de ciegas, el nivel de los oponentes y si es posible opta por un trato basado en ICM (Independent Chip Model), que será justo para todos.